FAVORES RECIBIDOS
Hace unos días, recibí la visita de familiares que radican en la ciudad de Campeche. Vinieron a recibir servicio médico en esta ciudad, ya que en su ciudad, no cuentan con los servicios de la especialidad que requerían.
Además del gusto de saludarlos, tuve la oportunidad de servirles, ya que tengo una deuda enorme con ellos, o mas bien, con sus padres, quienes me dieron la gran oportunidad de continuar estudiando, cuando en mi pueblo habíase agotado toda posibilidad de estudiar mas allá de la primaria.
La ayuda que recibí de ellos, dio un sesgo monumental a mi vida, pues fue primordial para, poco a poco y con mucho esfuerzo, continuar estudiando, hasta convertirme en un profesional de la contabilidad y las finanzas.
Desde entonces, tengo siempre muy presente, una frase que encierra una mega verdad: “Quien hace un favor, nunca debe recordarlo y quien lo recibe, nunca debe olvidarlo”
Sirva esta oportunidad para extender un reconocimiento pleno y total a mis tíos Carmen y Catalino (QEPD), a quienes nunca podré corresponder, por todo el apoyo económico y moral que recibí, cuando aún muy pequeño, decidí abandonar mi pueblo y trasladarme a este puerto que me ha dado todo lo que tengo en la vida y que, gracias al Creador, me acogió con cariño y sin reservas, desde hace casi 44 años.
sábado, 15 de diciembre de 2007
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